martes, 5 de agosto de 2014

Ayer, al regresar de un viaje de trabajo, tuvimos que hospitalizar a Wanda.
Wanda es una Bull Terrier, tiene un poco mas de 12 años con Geraldine y conmigo.
De como llego a ser parte hoy de nuestra familia, con 2 años es otra historia.
El amor que recibimos de ella, es incomparable. No he conocido a ningún ser con la capacidad de brindar cariño y amor como el de ella. Tan a nosotros como al resto de la familia. Muchas cosas compartimos, Wanda vio nacer a 2 sobrinos nuestros. Incluso cuando eran bebes, los cuidaba mientras dormían en nuestra cama, en alguna de las reuniones familiares.
Hoy no esta bien. Me dicen que la edad nos llega a todos. Inclusive a ella.
Se que jamas la voy a olvidar. Quizás por el hecho de ser humano soy egoísta, un sentimiento que Wanda nunca tuvo, he empezado a escribir, para poder ayudarme, para poder tratar de que este dolor, que esta furia desaparezca.
Querida Wanda, perdona por todas las veces que tuve que dejarte sola. Se que entendías que teníamos que salir a trabajar. Se que nuestra ausencia no podia ser reemplazada por un televisor prendido.
Gracias por mostrarnos tu alegría en cada regreso, en cada mañana. Somos bendecidos por tanto amor de tu parte. Ojalá que alguna vez yo pueda transmitir un 10% del amor que tu nos das. Espero que no sea tarde para poder aprender cosas de tí.




No hay comentarios:

Publicar un comentario